Es fácil hacer buenas fotos con tu cámara DSLR. Lo primero que debes hacer es encontrar un buen lugar para hacer la foto. Quieres que el sol entre por la ventana, pero no que sea demasiado brillante ni demasiado oscuro. El mejor momento del día es justo antes del mediodía, cuando el sol está bajo en el cielo y aún no está directamente encima. A continuación, asegúrate de que tienes la cámara preparada y cargada. Si tienes un cable disparador remoto para la cámara, utilízalo: te facilitará la toma de fotografías y evitará que tengas que coger la cámara cada vez que se dispare (lo que puede resultar molesto). Por último, colócate de forma que tanto el sujeto como tú estéis centrados en el encuadre. A continuación, haz una o dos tomas de prueba para asegurarte de que todo se ve bien antes de darle a «disparar».
Una vez que lo tengas todo preparado, empieza a disparar.