La patente, que ha sido registrada en la Oficina de Patentes de los Estados Unidos, habla de una carcasa construida, bien como una especie de tubo de cristal hueco, o bien en dos partes de vidrio selladas herméticamente con láser.
De esta forma conseguirían varios objetivos. Por un lado crearían un dispositivo impermeable, resistente al agua. Por otra parte, aseguran que este tipo de material es perfecto para mejorar las conexiones inalámbicas.
Aparte de estas dos razones, según Apple, la resistencia del vidrio ha sido otro de los motivos para pensar en él para recubrir sus productos. A pesar de lo que pudiera parecer, hoy en día existen algunos tipos de vidrio cuya resistencia supera a otros que, tradicionalmente, han sido usados para fabricar dispositivos electrónicos.
Pensar en un iPhone 5 para incorporar este tipo de tecnología es muy precipitado. Normalmente, desde el registro de una patente hasta su comercialización suelen pasar varios años, en los que las marcas se dedican a investigar la mejor forma para llevarla al mercado.